¿Cómo va tu miércoles?
(…)
A mí hoy, me ha costado levantarme más de lo habitual.
Aunque siempre he sido de dormir poco, últimamente me mata no dormir al menos seis horas. (Estoy mayor, tengo que hacer algo)
Recuerdo que en mis tiempos en la televisión en Telecinco, era el primero en entrar y el último en salir.
No te digo más que yo me encargaba de plantar los árboles y poner las calles de Madrid.
¡Madre mía!
¡Y tó pá ná!
Aquellos madrugones no los hacía para mi trabajo, ni para mi queridísima y adorada María Teresa Campos, que era mi jefa.
Te confieso que lo hacía por mí.
Por mi inseguridad.
Por mi miedo a no estar lo suficientemente preparado para responder a las preguntas de la jefa.
Era mi síndrome del impostor el que me arrastró durante muchos años a pegarme esos madrugones.
Nadie me lo pidió pero yo me lo exigí.
Siempre me obligaba yo mismo, a leerme en la madrugada hasta las esquelas de los periódicos de provincias por si de ahí sacaba alguna noticia.
¡Nunca era suficiente !
¡Valiente gilipollas!
Había días que el fenómeno Gran Hermano lo copaba todo en el programa y mi sección desaparecía.
Entonces terminaba quemado, amargado y frustrado porque todo mi esfuerzo no valía la pena.
Por fin aprendí que no era necesario hacer tanto el imbécil por el miedo a no saber todas las respuestas a las preguntas de la jefa.
Aprendí a decir; “Eso no lo sé pero lo miro ahora mismo” y nunca pasó nada.
Aprendí a ponerme límites.
Aprendí la dulzura de saber equivocarse.
El aprendizaje del error.
Aprendí que el miedo sólo existía en mi cabeza.
Aprendí a demostrar toda mi valía sin que afectara a mi salud física y mental.
¿Tú madrugas mucho?
Voy a por un café y charlamos de todo esto
Te ayudo eliminar bloqueos que no te dejan triunfar y disfrutar en tu trabajo. ¡Crecer profesional.MENTE!
2 comentarios
Alejandra · 22 de septiembre de 2022 a las 04:41
Que yo hacia lo mismo!!! Pero ya aprendí 🙂
Óscar Modrego · 22 de septiembre de 2022 a las 07:13
Somos muchos a los que nos ha atrapado alguna vez nuestra falta de seguridad y autoestima 😉
¡Bravo Ale!